Los grandes cambios se pueden generar a partir de nuestros pensamientos. Está visto que todos tenemos ciertas capacidades , unas más que otras, pero que en el transcurso de la vida dessarrollamos más destrezas en aquello en lo que mejor nos desempeñamos, y esto se debe a que la actividad repetitiva de una actividad permite la interconexión neuronal y su crecimiento en la medida que la practicamos. De esa forma aquella persona que practica una actividad particular podrá estimular la corteza cerebral donde son recibidos los impulsos ocasionados de dicha actividad, como por ejemplo lo podría hacer un pianista que mediante la practica ha desarrollado más su corteza cerebral que se encarga de la coordinación motora de sus dedos, que son imprescindible para el buen manejo y desempeño de su actividad.
De esto podríamos deducir, que si nosotros estimulamos nuestra corteza cerebral con pensamientos positivos unos tras otros, podríamos estimular la creación de nuevos puentes y sinopsis en nuestra corteza, cambiando así el desempeño de cierta área de nuestro cerebro relativa a la condición emocional de individuo, entonces podríamos creer que podemos y tenemos la capacidad de cambiar nuestra perspectiva de la vida desde nuestro interior.
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